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Lucia Di Martino



Al bajar me encontré con Trébol que me mostró el camino al comedor, un gran salón con una mesa de esas largas que se ven solo en palacios de gente adinerada donde cada uno come a un extremo de la mesa separados por varios metros. Por primera vez desde que nací después del asesinato de mi familia volví a sentir, estaba confundida, y asustada incluso, no entendía esos sentimientos, sabía lo que eran pero a la vez no...

-Trébol ¿verdad? -las palabras salían por impulso.- ¿porque yo?... Estoy segura de que conoceis mi historial hasta el último detalle, mi pasado... Estoy rota, ¿porque creeis que puedo ser útil y no una amenaza? -me picaban los ojos, sin darme cuenta, una lágrima afloró y se deslizó por mi mejilla izquierda, ¿eso era lo que llamaban llorar? Era la primera vez que me pasaba algo parecido... Me asustaba.

Me temblaba la voz, los labios... Hacía frío, mi corazón latía deprisa, de repente me sentí angustiada y ligeramente mareada. ¿Es esto lo que llaman un ataque de pánico? Cerré los ojos y respiré profundamente, poco a poco me calmé. Recuerdos volvieron a mí de cuando era pequeña, tenía cinco años y estaba en el estudio de mi padre Vittorio Di Martino, escribía una carta pero no pude recordar que contenía o a quien iba dirigida, parecía feliz, no sé que significa ser feliz...

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Rogue Miriade

Ya vestida, me dirigi tarareando hacia las escaleras, aver si podia comer algo, los chupachups no eran suficiente para saciar mi hambre.Veamos...las escaleras...ah si, al final del pasillo, las baje de dos en dos sosteniendome el ancho vestido por abajo.

Alguien llamo la puerta y me desconcentró de mi trabajo, no se si sera muy buena idea que vieran todo el follón que había hecho con el móvil, lo guarde debajo la cama para montarlo de nuevo luego.

Quien llama?

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Otis

Nadie respondió...

Tienes la sensación de que nadie lo haría.

Me dirigí hacia la puerta y asome ligeramente la cabeza a ver que encontraba...

Otis

Viste una pequeña caja blanca...era bastante estilosa y la verdad..llamaba la atención...

La cogí y me metí rápidamente en la habitación.

(Hell yeah!... Era genial). Primero iba a dejar el movil en su estado original y seguidamente voy a ver que es lo que me puede ofrecer este pequeñin. Estaba absorbido por mi "trabajo", el tiempo había dejado de importar para mí.

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Rogue Miriande

"¡Hola Lucy,hola Trebol! Me encaaanta el vestido, y los moviles son...¡una pasada! no tenemos esta tecnologia en casa >.<"-dije emocianada:"Bueno, donde esta la comida ¿eh eh?"-empece a mirar de un lado a otro, estaba en tal estado que me comia hasta una pared.

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Lucia Di Martino

Rogue llegó tan alegre e inocente como siempre, aunque era obvio que no era para nada inocente, se parecía a mí. Me enjuagué las lágrimas mientras estaba de espaldas a ella para que no me viera y luego me giré, ¿acababa de llamarme Lucy? Bueno, tampoco es que me importen demasiado los motes aunque preferiría que se refiriera a mí como Lucia, quizás era difícil de asimilar ese nombre en inglés.

-Gracias. -contesté con una sonrisa a su cumplido.- La verdad es que yo tambien tengo hambre.

Escuche las palabras de Trébol, había llegado una chica nueva. Ya habrá tiempo de conocerla y analizarla, pronto espero. Trébol comentó algo más acerca de su promoción, cualquier información era bienvenida, era obvio que habían pasado por cosas amargas también, debajo de aquella fachada que intentaban mostrar.

Cuando termine de hablar con Joker deje todo en su sitio, el movil en el cajon, y baje a almorzar.

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Rogue Miriade

Al presenciar semejante escena, le dedique una sonrisa abierta a Picas y dije:"A mi no me enseñaron a mostrar mi afecto asi...parece que voy a tener que aprender mas cosas >.<, ¿falta mucho para que llegue la chica nueva? mi estomago empieza a rugir, jo"-me toque la tripa y me volvi a sentar.

Parece que entre los dos hay algo, no solo se forjaron asesinatos en este campamento...^^

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Elainne Hinari [

Había multitud de ropa de todo tipo, y una etiqueta junto ellos. Todos eran muy bonitos, quizás no fuese tan malo este sitio...
De repente sonó el móvil... lo cogí y había allí tres mensajes...

Elainne: ¿Por qué me llegan a mí estos mensajes?... ya está, sé quién puede responderme a esa pregunta...

Y volví a marcar el número de Joker
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Llamada a Joker

Peter Qian

-Todavia falta para la clase y no quiero manchar el traje al comer

Dije con una sonrisa juguetona a Trebol, aunque despues empezo una escena rara con una especie de relacion amor-odio entre Trebol y Picas, incluso lanzandose cuchillos.

Busque en mis bolsillos y saque una tableta de chocolate que se la ofreci a Rogue, quizas si me acercara a esa pequeña veria como puede ser una mafiosa si parece la mas normal de todos aqui.

-Por si te sirve para esperar

Rogue Miriade

"¡Chocolate! Graciaaas"-dije sonriendo:"Mmmm que rico"-me empece a comer la tableta cuadradito por cuadradito:"¿Alguien quiere? Para esperar asi juntos comiendo ^^ "-pregunte mirando a los demas.Ojala estuviesen aqui mis hermanas para compartirlo con ellas...aunque bueno, viendolo desde otro lado, esta sera durante un tiempo mi nueva familia.

"Gracias otra vez Peter"-le di un abrazo muy fuerte.

Colgué el teléfono, y lo dejé encima de la cama. Comencé a mirar minuciosamente el armario, buscando cuál de los vestidos ponerme. Voló el tiempo escogiendo cual me pondría hasta que al final me decanté por alguno de color oscuro, un poco escotado [offrol: ¡Un poco he dicho!], y me lo llevé conmigo hacia el cuarto de baño. Una vez allí me puse a mirar minuciosamente, con curiosidad, que había en aquella sala.

Tras dejar la habitación y deambular un poco por la casa llegué a donde estaba trebol, junto con 2 chicas y 1 chico.

Hola... buenos dias! Soy Dadou, encantada. ¿Habéis almorzado ya? He salido lo antes posible... ni siquiera me he cambiado, no quería haceros esperar.

Ah! Por cierto... mi movil me manda unos mensajes muy raros... ¿Qué pasa trebol? creo que la he liado... que me he gastado un montón de pasta en un portatil y un rail... no se que mas... ¡Pero no pedi nada de eso a jocker, jolin!

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Había todo lo que pudiese necesitar... perfecto. Pues intenté darme la mayor prisa posible y me quité la ropa que llevaba encima, me metí en la ducha y me duché. Luego, me vestí y me peiné con un peinado similar al que tenía, y me puse a maquillarme, poniéndome sombra oscura para que fuese a juego con el vestido, y me puse las gafas de nuevo. Cogí unos zapatos de tacón del armario, y salí de mi habitación con prisa, pensando "¡Llego tarde, llego tarde, llego tarde!".

Puede que realmente fuese una falsa alarma, pero me entretuve demasiado en mi habitación.