La finalidad de este apartado es detallar, al milímetro, el pueblo en el que os encontráis atrapados. Y puesto que han pasado varios días, antes del momento exacto que da inicio a la partida, se puede dar por hecho que todos vosotros habéis callejeado por Blutstein, por lo que ya lo conocéis lo suficiente como para necesitar información a fondo del lugar. Este es el objetivo del post, mostraros el lugar en el que estáis, y lo que tenéis a vuestro alcance. Todo lo que vais a leer a continuación, se supone que, una vez comenzada la partida, lo sabéis, porque ya lo habéis visitado (o al menos habéis pasado por delante), y nada que se mencione dentro de la partida, que ya haya sido explicado aquí, debe resultaros novedoso. Por eso, es obligatorio leer este post.
BLUTSTEIN, el pueblo, sus calles y su genteBLUTSTEIN(Pueblo, +2500 habitantes) Perdido en la inmensa estepa de Moth, Blutstein ocupa el llano que se abre entre la garganta Iadului y el bosque Gehena. Sus edificios están a medio camino entre los de un pueblo y una ciudad, pues en su extensión se hayan desde casas pequeñas y rurales, construidas con materiales naturales como madera y arcilla, hasta enormes edificios de hasta cuatro plantas, erigidos con piedra y ladrillo. Las calles, aunque pavimentadas, no cuentan con todo el suministro eléctrico que un pueblo tan evolucionado desearía, por ello, las farolas que alumbran sus tenebrosas calles son escasas, y la mayoría de barrios viven en la penumbra.
Blutstein siempre ha sido cuna de gente religiosa, y prueba de ello es su inmensa catedral gótica, cuyo campanario se erige orgulloso sobre los tejados de la ciudad. De magníficos relieves cristianos, y feroces gárgolas, esta antiquísima construcción siempre ha sido una visita obligatoria para todo buen peregrino.
Las Calles de BlutsteinGeográficamente hablando, Blutstein se encuentra en Moth, al Norte de Gaïa, exactamente en algún lugar al Este meridional de los Páramos de la Sombra. A un escaso día de viaje del monasterio de Stelea, y a unos cuantos más de Jaarenghäff. Desde la firme meseta que ocupa Blutstein, se puede vislumbrar en el horizonte los vastos páramos de Moth, y muy allá, confundiéndose con una sombra del levante, la garganta Iadului. Al Norte, invadiendo la lejanía, el inexplorable bosque Gehena. La flora y la fauna no son precisamente compañías agradables. La tierra es yerma, de un marrón parduzco, a veces incluso el polvo es tan gris que puede parecer ceniza. La poca hierba que crece en los campos que rodean Blutstein no son más que hierbajos secos, de tonos amarillos apagados. Los animales que descansan en los árboles, secos y desnudos, suelen ser cuervos, e incluso buitres. Todo tipo de carroñeros, como si la muerte en aquellas estepas fuese algo demasiado frecuente. Blutstein está bastante alejado del resto de ciudades y pueblos de Moth, pues hacen falta varios días de viaje a caballo para llegar a la ciudad más cercana. Lo único civilizado que puede encontrar más o menos próximo al pueblo, es algún que otro campamento Les Zigeuner.
La distribución de Blutstein es la siguiente: de fuera para adentro, el tamaño de los edificios va aumentando, dejando a las casas pequeñas en las afueras y a los grandes bloques de varias plantas en el centro del pueblo. La plaza central, presidida por la inmensa catedral gotica, suelen realizarse actos festivos, comerciales y, muy de vez en cuando, ejecuciones.
Lugares de interés de BlutsteinEl PozoFrente a la catedral de San Guillermo, justo en el centro de la plaza central, hay un pozo, construido con piedra y mecanizado con una desgastada polea de madera. El pozo en sí no tiene nada de especial, pero cuentan una leyenda muy popular sobre él, que todo blutense conoce. La historia habla de un macabro suceso, ocurrido muchos años atrás. Al parecer, un niño jugaba por las cercanías del pozo, cuando este todavía no tenía una pared de piedra circundándolo, y en un descuido, el pequeño resbaló y cayó en su interior. El miedo y el agua no tardaron mucho en cobrarse su vida.
Los padres del chiquillo, angustiados por la pérdida, rogaron a San Guillermo que le devolviese la vida a su hijo. Pero el Santo no respondió a sus plegarias. Tras varios días de decepción, en un acto de locura absoluta, los padres firmaron un pacto con un oscuro ente demoníaco, un ser de ultratumba que se hacía llamar Adramelech. Este último recogió sus almas, a cambio de devolverle la vida al difunto, quien, según palabras del demonio, volvería a la vida con la próxima luna llena.
Los padres esperaron ansiosos la fecha indicada, y allí, bajo una luna inmensa, a los pies del pozo, esperaron a que su hijo regresara al reino de los vivos. Aunque, terriblemente decepcionados, no fue su hijo vivo lo que surgió de aquel pozo, sino el cadáver del infante, un no-muerto putrefacto y maloliente, sin ningún tipo de raciocinio ni consciencia. El horrible ser se abalanzó sobre quienes fueron sus padres, y los arrastró al pozo, sumergiéndolos hasta el oscuro abismo.
La CatedralUn enorme pórtico, flanqueado por estatuas de santos, da paso a la inmensa catedral de San Guillermo. La fachada se encuentra cubierta por ventanas abocinadas, de techumbre adintelada y decorada con multitud de pináculos típicos del arte gótico. El plano intenta imitar la forma de una cruz, con un cimborrio en el centro. Varios arbotantes sostienen los laterales de la inmensa construcción. El exterior está decorado con símbolos religiosos y gárgolas. Y el interior, con preciosas vidrieras que reflejan la luz, acoge las figuras esculpidas de los santos más célebres de la región.
El BurdelPara el descanso y esparcimiento de los varones solteros, Blutsein cuenta con una casa de citas. Un edificio que recuerda a una mansión nomble, cuyo interior refleja un gusto exquisito para el bienestar, y que busca, sobretodo, la comodidad del cliente. Cuenta con varias habitaciones en la planta superior, todas ellas con cómodas camas con dosel, y un sin fin de detalles que expresan un lujo sobrecogedor hasta para los más exigentes.
Los clientes pueden elegir a su acompañante entre más de cuarenta hermosas damas, todas ellas criadas y mantenidas por la Srta. Joshane, dueña y regente del negocio. Las chicas no tienen más de 25 años, ni menos de 19. Las hay rubias, morenas, pelirrojas, de piel clara, oscura, incluso hay una asiática para satisfacer los caprichos de los más fetichistas. Aunque, por supuesto, estas prostitutas no son unas cualquiera, son acompañantes de lujo, que, dentro de lo que cabe, esperan un respeto y un trato digno de cualquier señorita. Y por si la cosa se pone fea, hay varios hombres rudos y fuertes en el local, que darán una paliza a todo aquel que intente pasarse de listo.
Como detalle, hay que destacar a Gianna, apodada “la flor inmortal”. Cuentan que hace gozar de tal manera a los hombres, que quedan satisfechos sin necesidad de quitarse los pantalones, por lo que la chica, a pesar de llevar casi cinco años ejerciendo la prostitución, todavía se mantiene virgen. Muchos jóvenes del pueblo están enamorados de ella, y otro gran colectivo la consideran una santa.
El Barrio PobreEn todos los pueblos y ciudades hay un barrio pobre, y Blutstein no es una excepción. Lejos del corazón de la villa, en uno de los extremos más alejados, hay varias calles de casas de madera, paja y barro, donde los propietarios llevan una vida desdichada como pocas. No tienen dinero, no tienen trabajo, no tienen comida, y para compensar estas deficiencias, tienen enfermedades, tienen enemigos, tienen problemas... ¿Quién dijo que el dinero no daba la felicidad?. Tras el incidente con el miasma, este barrio, totalmente pegado a la frontera natural de la ciudad, es el lugar más cercano al veneno gaseoso y por tanto, el más peligroso. Esto ha impulsado a sus desdichados habitantes a huir de sus hogares, para vivir en las calles como mendigos. Aunque no tienen ninguna duda, prefieren dormir en el frío asfalto, antes que arriesgarse a inhalar esa niebla tan terrorífica. Este suceso ha aumentado considerablemente la mendicidad en Blutstein, y últimamente solo se ven pobres desamparados merodeando por las oscuras calles del pueblo.
La Gente de BlutsteinLos pueblerinos de Blutstein, al contrario de lo que se puede encontrar en Moth, nunca han sido una comunidad quejica y desagradecida. Alguna vez hasta han sido considerados hospitalarios, y no era raro encontrar a más de una familia que, aún viviendo en una tierra tan siniestra, era realmente feliz. Pues dentro de lo habitual en las Tierras Oscuras, Blutstein siempre ha pasado desapercibida para los sucesos paranormales, hasta ahora. Desde el surgimiento del miasma, la gente se ha vuelto fría y desconfiada. Temerosos de los extraños sucesos que acontecen en el presente, sólo piensan en sí mismos, en sus familias, y en salir de casa lo menos posible. Desde entonces, en la calle, sea la hora que sea, no se ven más de dos o tres transeúntes que, por alguna emergencia o responsabilidad ineludible, tienen que salir de su casa. Únicamente se reúne el pueblo cuando el alcalde, un señor adulto y respetado, convoca una reunión para tomar medidas. Aunque por más que se realizan este tipo de asambleas, en ninguna se saca nada en claro, y nadie ha encontrado todavía una solución factible para combatir el miasma.
Personajes RelevantesLos siguientes personajes son, por decirlo de algún modo, los más destacados de Blutstein. Aquellos que merecen nombrarse por encima de los demás, ya sea por la función que desempeñan o por el misterio que evocan sus acciones. Los personajes protagonistas de la aventura, han estado tiempo suficiente en el susodicho pueblo como para conocer a sus individuos más característicos. Por lo que, los personajes que se presentan a continuación, forman parte del conocimiento de los PJs de la partida.
Nombre: Ciprian Vlas Exile
Sobrenombre/Apodo: El Alcalde
Rango/Posición Social: Alcalde
Edad: 54 años
Altura: 1,63 cm
Peso: 89 kg
Hobbies: Jugar a las cartas
Lo que más aprecia: Los aplausos y vitoreo del pueblo hacia su persona
Lo que más desprecia: Los delincuentes y criminales
Ciprian es un hombre cincuentón, con un prominente bigote y ojos cansados y azules. Siempre viste de un modo elegante, y nunca descuida la compañía de su sombrero de copa. Lo que se sabe de él, es que es una persona sencilla, humilde, que solo ansía la tranquilidad y la paz. Tiene una lujosa habitación en el Ayuntamiento, pero él siempre prefiere dormir en su casa que, aunque es algo decadente, le trae muy buenos recuerdos de su infancia. No está casado, pero hace unos cuantos meses que flirtea con la dueña del burdel (o al menos eso dicen los rumores). Lleva viviendo en Blutstein toda su vida, y es de los aldeanos más veteranos de toda la villa. Tal es un longevidad, que nadie llegó a conocer a sus padres, quienes murieron cuando él era tan sólo un bebé.
Nombre: ¿Violeta?
Sobrenombre/Apodo: Desconocido
Rango/Posición Social: Desconocido
Edad: Desconocida
Altura: 1,71 cm
Peso: 60 kg
Hobbies: Desconocido
Lo que más aprecia: Nadie lo sabe
Lo que más desprecia: Nadie lo sabe
La joven más temida y respetada de Blutstein responde al nombre de Violeta. Lleva casi un año viviendo en el pueblo pero, es tan sumamente introvertida, que nadie sabe nada sobre ella. Muchos hasta sospechan que incluso su propio nombre es falso. Lo único que se puede decir con seguridad de ella, es que es una matademonios por excelencia. Siempre que hay un problema o altercado de origen sobrenatural, ella corre rauda hacia el meollo del problema y lo corta en dos, a veces hasta literalmente. Es increíblemente imponente en persona, y nadie sabe por qué motivo se mudó a Blutstein.
Nombre: Desconocido
Sobrenombre/Apodo: El Lector
Rango/Posición Social: Desconocida
Edad: Desconocida
Altura: 1,85 cm
Peso: 79 kg
Hobbies: Leer
Lo que más aprecia: ¿La lectura?
Lo que más desprecia: Nadie lo sabe
Más enigmático incluso que Violeta, es el joven al que todos llaman "El Lector". Se trata de un chico, aparentemente de unos veintipocos, de piel clara y cabello brillante como el oro. Siempre lleva gafas, y tras ellas observan dos inquietantes ojos verdes, que escrutan cada centímetro de su ángulo de visión. Lo curioso de este personaje, y es el motivo por el que se ha ganado su apodo, es que muchas noches acostumbra a subirse a los tejados y con un interminable libro en sus manos, comienza a leer bajo la luz de la luna. Algunos aldeanos aseguran que ha llegado a estar noches enteras leyendo, inmóvil, como cincelado en bronce. Nadie sabe nada de este muchacho, aunque lleva viviendo muchos años en Blutstein, y aunque los vecinos se lo cruzan cuando sale a hacer la compra, nunca nadie ha podido sonsacarle ningún tipo de información. Según cuentan, es muy simpático, y siempre sonríe cuando habla. También acostumbra adoptar un comportamiento muy cortés y caballeroso, como si fuese alguien de alta alcurnia. En contra de esta teoría, su casa es de las más pobres de la villa. Sin duda, El Lector, es y será un enigma para todos, al menos mientras él así lo desee.
Nombre: Gianna Luna Nicolae
Sobrenombre/Apodo: La flor inmortal
Rango/Posición Social: Prostituta
Edad: 24 años
Altura: 1,76 cm
Peso: 66 kg.
Hobbies: La natación y el baile
Lo que más aprecia: El amor
Lo que más desprecia: Prostituirse
Esta hermosa joven, de pelo y ojos rojizos, se ha convertido en todo un símbolo de Blutstein. Su curioso don, para producir un inmenso placer con un par de besos, es una leyenda que se ha extendido por gran parte de Moth. Diariamente la visitan jovenes enamoradizos, que le suplican su amor a cambio de las locuras más desorbitadas. La chica, tímida y recatada, nunca ha tenido novio a pesar de todos sus pretendientes.
Nombre: Jerome "Eidrael" Gnogos
Sobrenombre/Apodo: Ninguno
Rango/Posición Social: Inquisidor
Edad: 23 años
Altura: 1,79 cm
Peso: 81 kg.
Hobbies: Matar
Lo que más aprecia: Matar
Lo que más desprecia: No Matar
Para quienes le conocen, su nombre, Jerome Gnogos, es sinónimo de locura y crueldad. Este inquisidor se caracteriza por la eficacia de sus trabajos, y la frialdad con la que los desempeña. Nació y se entrenó en Abel, a los 12 años ya fue ascendido a Inquisidor, para luego, progresivamente, ganar títulos y méritos entre la Santa Orden. Tal fue era su ego, que terminó consumido por la arrogancia y la locura, hasta el punto de llegar a quitar vidas por el mero hecho de ver a los cuerpos desvanecerse. La Santa Inquisición no podía prescindir de él, pero tampoco podía permitir que representara tan denigrantemente al Santo Oficio, por lo que decidieron enviarlo a Moth. Al poco tiempo de pertenecer a la Hermandad del Crepúsculo, adoptó el método de sus hermandados, y viajó solitariamente por todo el principado, exterminando todo aquello que no fuese obra de Dios.
Nombre: Andrea Joshane Urzica
Sobrenombre/Apodo: Srta. Joshane
Rango/Posición Social: Dueña del burdel
Edad: 40 años
Altura: 1,71 cm
Peso: 78 kg.
Hobbies: Disfrazarse
Lo que más aprecia: La caballerosidad
Lo que más desprecia: El machismo
No hay mucho más que añadir sobre esta señora, de avanza edad y carácter refinado. Es la dueña del burdel de Blutstein y siente un profundo cariño maternal hacia sus chicas. Su favorita es Gianna, la flor inmortal. Posee además una valiosa colección de máscaras y siente una insaciable afición por el disfraz. Tal es su júbilo disfrazándose, que siempre suele ir con una máscara sobre sus ojos. Aunque es algo egocéntrica y descarada, tiene el valioso don de la hospitalidad.
Nombre: Reynald Zebris
Sobrenombre/Apodo: El Capitán
Rango/Posición Social: Capitán de la Guardia de Blutstein
Edad: 34 años
Altura: 1,73 cm
Peso: 81 kg
Hobbies: El tiro con arco
Lo que más aprecia: La fama
Lo que más desprecia: Todo aquello que se le escape de las manos
Reynald, más conocido como el Capitán, es el líder general de toda la milicia blutense. Aunque dentro de la propia guardia hay diversos rangos, él está por encima de todos los tenientes y subtenientes, poseyendo el mando y control absoluto de los soldados del lugar. Por supuesto, fuera de Blutstein, tiene superiores, pero tal y como se han puesto las cosas, eso no importa demasiado, por lo que ha decidido encargarse personalmente de encontrar una solución al miasma. Cuenta con más de una veintena de hombres a sus ordenes, y está dispuesto a todo por tal de consagrarse como salvador del pueblo. Tiene un carácter frío y reacio, es desconfiado, violento y detesta que le interrumpan cuando está hablando.