Con amigos como estos...

-Entiendo. ¿Y que sabeis de esos delincuentes?- respondió el capitán.

Llegamos por fin, esperamos un poco hasta que venga el capitan que Ahuyenta a todos los que no fuermaos nosotros y Marcus. Rose, habla, mejor ella que yo, aunque todavia podria meterme en batalla perfectamente estoy demasiado cansando para intentar comunicarme con ellos en su idioma. Solo respondi a la ultima pregunta.

- Eran simples bandidos, tener un Skulling con ellos, traidor seguro. Encontrarlo muerto, no por nosotros. La bestia estar muerta tambien. Dudo que dar muchos mas problema a partir de hoy.

-Mi lanza les dió muerte- empezó Gódia a contar su historia.

En resumidas cuentas contó como por misión especial de lso caballeros del cielo había salido hacia el norte, junto con una caravana de suministros imperales para facilitar la cosa.

Cerca de Eron, donde visteis el campo de batalla los emboscaron por la noche un grupo enorme de bandidos zarrapastrosos, debían ser por lo menos media centena capitaneados por un desertor y dos salvajes con su bestia, los Skulling que mencionaba Aren.

Logró reunir a parte de la caravana pero los acabaron superando y la tomaron presa, al resto los pasaron a cuchillo, a ella se la quedaron porque parecía rica, querían pedir un rescate.

Parece que repartieron parte del botín y se dispersaron, si hubieras llegado antes o despues a la escena podría haber resultado fatal. Y que como no sabíais si iban a volver cogisteis los baules importantes, del dinero, y s fuisteis con viento fresco, forzando lam archa.

Fue entonces cuando al capitán le cambió la cara -¿Baules?, no, en cada envío solo va un cofre con oro y plata. Estas segura de que eran los dos de la última caravana-

-Segura- respondió Gódia.

-Dices que pasaron a todos a cuchillo, ¿incluido al oficial al mando?-

-Sí-

-Mierda. Aqui hay algo raro. Demasiado, una cosa así suele incluir a las esferas.... vamos a tener que abrirlos, si hay algo raro tendremos que hablar con Tadeus directamente. En bonito fregado me he metido.- dijo finalmente el capitán.

- Ya decía yo que teníamos que haberlos abierto...

Cuando se dio cuenta que había hablado en voz alta, disimuló lo mejor que pudo.

Gòdia mira a la arquera con resignación.

Pues vas a ver cumplido tu deseo. Vamos a abrirlos.

El capitán salió un momento y volvió con un par de herramientas del herrero. Fijó la cerradura y la reventó fácilmente.

Abrió el primer cofre.
En el había lo que esperabais, oro y plata, y documentos sobre a quién iban dirigido los pagos. Lo normal, la mayor parte para apoyar órganos del trono, como espías o caballeros del cielo.
Todo eso todavía tenía que fundirse y hacerse monedas, lo que aumentaría mucho su precio.

Abrió el segundo cogre. Dentro, perfectamente encajado, había otro cofre más pequeño, de piedra oscura, de un color azul marino que tenía un ligero brillo residual. La tapa solo estaba encajada.
Y al abirlo parecía casi una broma, dentro había una cajita negra, acolchada por fuera, casi como un joyero. Cajas dentro de cajas dentro de cajas.

Pero en el momento de abrir la tapa de piedra, a Perttu le llegó una sensación. Magia. No pudo reconocer bien la piedra, al menos por el momento, pero la caja tenía un hechizo que lo encantaba, y lo protegía de efectos sobrenaturales, tanto por dentro como por fuera.

La cajita tenía un simple cerrojo sin cerradura. Al abrirlo, dentro, desansando sobre el fondo acolchado solo había una pieza de metal, de forma redonda, recordaba a una moneda de gran tamaño, de unos 6cm de diámetro. Había en el grabado un signo irreconocible, parecia una figura humana delante de un sol.

-Marcus, por favor, dime que tu entiendes algo de esto- susurró el capitán.

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Aquellso que queiran intentar tirar ocultismo o historia adelante, pero lo tienen muy chungo por el momento.

El silencio cayó sobre vosotros. No teníais ni idea de que era eso. Tan solo Perttu detectaba cierta aura mágica en ello.

Marcus exámino la caja. -Piedra índigo....Al, te voy a hacer un favor y te voy a quitar el marrón de encima, desde este momento me ocupo yo de todo, estos son mios- dijo señalando a vosotros cuatro.

-Vale, pero me estoy en esto hasta que el dinero llegue a donde tiene que llegar- respondó aliviado.

Lo primero que pasó, fue que os chocó bastante aquello, Marcus, que era poco más que un aventurero con privilegios le estaba dando una orden a un capitán imperial, y este parecía aceptarlo.

-Chicos, nos hemos metido en algo gordo, y sospecho que nos hemos llevado algo muy importante, me temo que os guste o no, estais conmigo en esto, o vais a tener serios problemas. Será mejor que empiece por el principio......-

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Bueno, y con esto doy por concluido el primer capítulo y de manera definitiva las intros y las reuniones iniciales. Dado el estado actual del foro voy a poner en suspenso la partida, aunque soys libres de seguir escribiendo no voy a avanzar la acción realmente, quiero esperar a ver que pasa con el foro. pase lo que pase la partida se continua, pero en una plataforma diferente. Y la idea es que se revitalice entonces.
En caso de que todo salga mal pues la mudare a otra plataforma, pero de momento queremos mantener la cohesión de la comunidad.

Llegados a este punto, me gustaría recibir críticas destructivas (aunque habeis hecho poco más que ir del punto A al punto B al punto C) y saber si cuento con vosotros a plena capacidad para continuar esto donde sea.