Prologo[David Hayter]

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'Dado de 10' : 7

El hombre queda como el de la gasolinera, aplastado contra el suelo pero vivo. La policia estaba demasiado cerca, asi que le dijiste a uno de los rehenes que avisara a la policia y te fuiste por el mismo sitio por el que entraste.

Tras salir voy deprisa, pero intentando no llamar la atención hasta la moto. Con la moto conduzco hasta un sitio apartado y recargo la pistola.

Con la pistola ya recargada vuelves a tu patrulla particular. Solucionas un par de crimenes no demasiado importantes y luego te das cuenta de que toca ir a recoger a Henry, ya que Yuko aun esta trabajando.

Voy por el camino más rápido para llegar hasta la escuela, quitandome primero el visor, y asegurandome de que el exoesqueleto no se vea.

Henry sale del edificio y sube a la moto. Llegais a casa y Henry va directo a la habitación a hacer los deveres. Tu bajas al sotano a guardar el exoesqueleto y las armas. Luego vas directo a la puerta, pues Yuko devia estar a punto de llegar, y asi era. Justo cuando saliste del sotano entró ella por la puerta, y allí te recibió con un beso.

¿Qué tal el trabajo? después de pasarme la mañana deteniendo crimenes sería agradable una conversacion normal...

-Pues bastante bien. Hoy no ha habido tanto trabajo como otros dias. ¿Que tal te ha ido a ti el dia?

-Veo que vas mejorando por dias, ¿eh?-te da otro beso-. Vamos a ver como lo dicen en las noticias.

Agarrando a Yuko por la ciuntura, fuimos hasta el sofá, y volvimos a tumbarnos como el día anterior. Volví a encender la televisión y puse las noticias... Me di cuenta de que sería capaz de acostumbrarme a esto...

Veis las noticias y vuelven a hablar del hombre de fuerza inhumana y piel resistente a las balas.
-David, que mania que tienes con dejarlos incrustados en el suelo.

Yuko te lanza una pequeña mirada que viene a decir: "si, ya, y yo me lo creo". Despues decide empezar como ayer, y esta vez Henry no habia bajado a cortar el momento. Debia tener mas deberes que ayer.

Comencé a besarla... tal vez hoy pudiesemos hacerlo en paz...
(Offrol: Baja cortinilla, pero te juro que te mato por las faltas...

(Off: D'oh. Vale, matame, pero te quedaras sin alguien a quien putear)

Y ahí va la cortinita. Cuando acabasteis y ya estabais vestidos fue justo cuando Henry acabó los deberes(casualidades de la vida... o no). El dia pasa con normalidad y os vais a dormir todos.

5 de febrero
Ya llevabas un mes combatiendo el crimen en la ciudad, y eras muy conocido por tus metodos... drasticos tales como incrustar a uno en el suelo para inspirar miedo. Ahora ya atacabas directamente al crimen organizado.
Volviste a casa tras tu jornada de heroismo. Habian varios coches aparcados frente a tu casa. Era algo bastante extraño.

Ni siquiera baje a quitarme el exoesqueleto. Me acerque, ignorando a los tipos, pero intentado llegar lo antes posible al piso.

Abriste la puerta de tu casa, y allí viste algo que no querias ver. Delante tuyo habia un monton de hombres armados apuntando a Yuko y a Henry, ambos amordazados. El que parece el jefe del grupito se te acerca.
-Nos gustaria pedirle que dejara de entrometerse en los asuntos de nuestro sindicato, y tambien nos gustaria que lo hiciera por las buenas.

Sueltelos.

Mi única respuesta. En ese momento todo me daba igual... Pero como esos cretinos les tocaran un solo pelo...

-Por supuesto, como no-de repente su voz paso de ser ironica a amenazante-, pero eso sera cuando se quite ese maldito exoesqueleto y prometa no volver a entrometerse en nuestros asuntos.

-No puede. Pero si no lo hace es muy probable que su pareja o su hijo adoptivo mueran inmediatamente, y eso es algo que ninguno de los dos quiere-te lo dice con una sonrisa sadica en el rostro.

Claro por supesto... Tenía que hacer algo.. ¿pero el que?

(Offrol: una pequeña descripción, no? Que quiero asegurarme que el tio lo pase mal si sobrevive ahora.)

El hombre no perdió esa sonrisa de su cara. Esa cara grasienta y asquerosa, acompañada de un cuerpo obeso con un traje mil rayas para intentar disimularlo. Los otros dos hombren mantenian sus caras cubiertas por unas gafas de sol, y el pelo bajo un sombrero. Ves en la mirada de Yuko que esta a punto de patear al que le estaba apuntando. Seguramente el otro se sorprenderia y seria el momento perfecto para endilgarle un balazo.

Comencé a prepararme.. En cuanto Yuko patease al tío, los otros dos iban a estrenar ombligos nuevos.

(Offrol: Me llevo la mano a los bolsillos de la gabardina en tono distraído, si me apuntan, saco un cigarrillo en vez de la pistola)