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Rogue Miriade

Bueno, parece que esta era la primera prueba que habia que superar aqui, al menos no teniamos que matar a nadie todavia. ¿Como conseguiria que me diese su numero...quizas con los encantos que me mostro Picas? Espero acordarme de la cara porque si no...mire rapidamente la foto e intente fijarme en sus ojos y su pelo lo mas rapido posible.Despues, bajaron los profesores...

Guau, que guapos estaban los profesores...sobre todo Trebol, me sonroje al mirarla.

"¡Me pido el Aston Martin!"-dije mientras corria hacia el coche, me subi delicadamente y mirando a todos les exclame:"¡Suerte a todos!"-y seguidamente cerre la puerta:"Vamonos chofer".

Peter Qian

Llego la clase de Picas, me vesti con aquel traje, aunque de corbatas preferi una de las mias que uso con los trajes, con un gris claro que me gustaba. Me quite las gafas, para esta noche no las usaria y me heche el pelo hacia atras con gomina, y me puse mi colonia que traia.

Habia que conseguir un numero de telefono, en principio no parecia nada del otro mundo, a fin de cuentas en la sociedad joven en la que vivimos es muy usual dar el telefono a casi cualquiera, pero seguro que habia una trampa en todo esto.

Nos dio la foto para memorirzar el objetivo, ciertamente con muy poco tiempo, "Estas cosas suelen requerir de un estudio apropiado, no a la ligera, sobre todo en la identificacion del objetivo".

Los profesores salieron, tambien irian a la fiesta, para vigilar claro. Trebol y Diamantes estaban muy bien.

Despues de ver a Rouge irse y despedirla con la mano me dirigi al deportivo a empezar la caza.

Llego la noche. Y con ella, la clase de Picas. Teniamos que buscar a un objetivo y, sin bailar con este, conseguir su numero de telefono. Picas nos dio una larga charla, y nos presento una foto, para luego romperla. Intente memorizarla todo lo que pude.

Tirada de Memorizar: 114

La pequeña se fue, detras de ella el "Don Legal", el que vino conmigo en el autobus, se fue. Mientras, me acerque a Lucia por detras. Le susurre -Estas preciosa... Buena suerte. -Le di un beso en la mejilla, y me monte en otro coche. Antes de subirme, me gire a todos, y con una sonrisa en la boca exclame -See yall in the party! -Entrando en el coche.

-Cuando quiera.

Lucia Di Martino

El almuerzo estuvo bien y pude relajarme un poco aunque apenas hablé. Esta noche tocaba la clase con Picas, no me entusiasmaba la idea la verdad, aún así subí a mi habitación y volví a cambiarme, esta vez escogí algo más provocativo, un vestido rojo sin tirantes y flada corta con un corte al lado, medias y tacones. El pelo me lo dejé suelto y me maquillé acorde con la ropa que llevaba. No era muy de ponerme joyas pero tenía un par de pendientes y un colgante que servirian para la ocasión aunque no fueran muy ostentosos eran bonitos.

Allí estábamos todos, con Picas explicándonos de que iba a ir nuestra primera clase, conseguir el número de alguien no era ningún problema, aunque no sabia si podría acordarme de su rostro, eso si que me podría suponer un obstáculo, pen todo caso ya se me ocurriría algo para improvisar, siempe hay una opción.

Jean se me acercó por la espalda y me susurró. Le sonreí y vi como se subía en uno de sus coches y como no hacía una de sus "salidas triumfales".

Me subí en el asiento de atrás de uno de los Mercedes y esperé a que el chófer arrancara.

El "juego" empezaba esta noche y picas iba a inaugurarlo, vaya suerte la mía...

El esmoquin no me resultaba muy cómodo... pero la verdad no me quedaba mal, había sacado el guapo de mi madre, cosa que en un principio no le daba mucho valor pero para esta "clase" le podría sacar provecho. Escogí la corbata roja... era la que estaba mas cerca.

Picas explico las normas del juego... como suponía no me gustaba el juego. No era muy bueno haciendo amigos, menos con presión encima de los hombros.

Picas nos dio unas fotos para que nos memorizaramos los rostros que aparecían en ellas.
(Humm... vale, tengo que concentrarme... sera mas fácil acordarme de las peculiaridades) Desvié mi mirada un momento hacia picas, vi como nos observaba...seguro que esta deseando que fracase (eh..mierda). Picas nos quito las fotos, no me tendría que haber distraido... no lo tengo del todo claro que lo pueda identificar.


Nos vinieron a buscar con coches lujosos y uno a uno fueron escogiendo vehículo. Escogí el mas "sencillo" si es que había alguno que encajara en ese grupo, nunca me había gustado la ostentación.

Al final había decidido ponerme "elegante", era algo a lo que no estaba acostumbrada pero habían sido tan pesados con eso que tuve que aguantarme. Ya que no sabía que vestido ponerme, no tuve otra opción que probar varios y elegir el que más me gustaba, por suerte hacer deporte a esculpido mi cuerpo y comprobé que casi todos los vestidos me quedaban bastante bien. Al final me decidí por un vestido negro, no muy atrevido, pero que me dejaba la espalda al aire y de zapatos unas parisinas oscuras adornadas con un lazo verde, a juego con mis ojos. El color negro resaltaba mi cabello rubio y mi piel clara.

El mayor problema fue el pelo, no sabía muy bien que hacer con el y al final decidí hacerme un recogido dejando varios mechones de pelo sueltos para darle un aire mas moderno.

Más tarde, cuando todos estabamos en el hall, Pikas nos explicó en que consistía la primera "misión", no era lo que me esperaba; primero, por que no se trataba de un asesinato y segundo, por que nos trató de una forma muy diferente a la primera vez que estuvimos con él.

"¿Memorizar? ¿Yo? Puffff lo intentaré... "

Más tarde vinieron a buscarnos varios coches, me acerque a un ferrari rojo que vi, siempre me han gustado los deportivos...

Hola chofer... Soy Dadou ¡En marcha!

Dije acompañado de un gesto vigoroso, que resultaba poco acorde con mi apariencia elegante.

Elainne Hinari

Decidí ponerme algo normal, ni demasiado elegante ni demasiado informal. Un vestido de color blanco y unos tacones del mismo color fue por lo que me decanté después de bastante tiempo frente el armario pensando qué ponerme, como siempre. El vestido era de tirantes y algo escotado, parecido al de la cena de cuando vine a parar a este lugar. El peinado no era problema, el mismo, me gustaba y era cómodo, hacía contraste con el vestido, y eso me gustaba.

Después, bajé al hall, con todos allí, y Picas comenzó a explicar la primera clase. Me entregó un sobre con mi nombre y una foto que tuve que memorizar. El tiempo era escaso, la presión podía conmigo, y encima memorizar no era precisamente mi especialidad, todo estaba en mi contra. Encima, tenía que conseguir su número de teléfono sin que realmente yo estuviese interesada en ello... tantos pensamientos en mi mente me impidieron completamente quedarme con nada de "mi objetivo"

Elainne: ¡Oh, no!... no voy a conseguirlo... no recuerdo ni el color de su pelo... ¿qué voy a hacer?... tendré que improvisar algo, pero ¿el qué?... estoy perdida... jo... - Pensé.

Justo después, nos informaron de que nos levarían en vehículos y que podríamos elegir. Yo me decanté por una limusina, era más glamurosa y apta para este tipo de eventos, daba más presencia. Me acerqué a ella y me acomodé en su interior, añadiendo un saludo al chófer.

Elainne: Buenos días... - Dije un poco nerviosa, no sabía que iba a hacer allí.

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Me dirigí al grupo donde estaban todos fumando y saqué un cigarrillo. Eso de los 7 VIP estaba muy bien, pero yo necesitaba algo de nicotina.
Perdonad, ¿Tenéis fuego?
Mientras lo pedía, miraba a los que salían de los coches. Debían de ser los VIP. Desde luego el tratamiento para con los VIP era la hostia.

aaa

Tras encender el cigarrillo le di una calada larga. Estaba necesitandolo.
Io sono Armand. dije. Es una de esas cosas que pasan cuando vives en Italia y practicas tu lengua paterna tres veces al año nada más. Encantado.
Parecían buena gente. Tal vez no fuese a estar tan mal la cosa después de todo.
Y gracias por el mechero.

Nos dieron unos broches, no encajaban en mi estilo pero bueno ya no venía de aquí. El micro no parecía nada del otro mundo así que tampoco me entretuve mucho con el, no era el primero que veía de ese tipo ni el último que veré por lo que veo.

Picas nos empezó a soltar mas detalles de su misión y la utilidad que le podíamos dar al broche.

Al bajar del coche nos convertimos en el centro de atención, cosa previsible con el despliegue que montamos. No me gustaba esta situación, pero ya tenia asumido que tendría que pasar por el aro muchas veces y hacer muchas cosas que no son de mi agrado en este "campamento".

(Cuanto antes empecemos mejor...). Eché un vistazo rápido entre el "público" para ver si reconocía a simple vista mi "objetivo" de la noche

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Lucia Di Martino

El coche se puso en marcha, el chófer saludo y entonces dijo algo acerca de un maletín que había en el asiento de atrás. Miré a los lados y allí estaba en el asiento de al lado, perfectamente colocado pidiendo que lo abriera. En su interior no había mucho, solo un broche y un auricular diminuto con una nota que ponía que me lo pusiera, y así lo hice. Picas empezó a hablar, era un engreído pero tenía razón en algunos aspectos d elo que decía, empezó a hablar de nuestro objetivo de la misión y como debíamos abordarlo, entonces pensé en la foto pero por desgracia mía no podía recordar nada importante acerca de ella.- ¡Cazzo! -se me escapó de mis labios.

Apenas recordaba nada significativo de la foto, podía recordar una iglesia en el fondo, "¿porque me acordaría de eso?" quizás el muchacho era religioso, iba bien vestido así que lo más probable es que la foto fuera tomada durante una comunión o confirmación, quizás la suya, o en un evento religioso, era lo más probable ya que nadie se echa una foto en una iglesia bien vestido para hacer turismo y eso es lo que me parecía más lógico, el chico era religioso. El traje era un traje elegante de color gris, suponiendo que los chicos de nuestra edad no suelen tener un armario abundante con ropa elegante habría una alta posibilidad de que el chico repitiera el mismo atuendo. Su rostro, estaba en blanco, creo recordar que llevaba gafas y tenía una sonrisa de esas de anuncio de dentrífico. No era mucho pero con un poco de suerte no habría muchos muchachos que se ajustaran a esa descripción, puesto que si llevaba gafas es posible que fuera por questión de moda o por una dficiencia muy grave ya que la cirugía ocular estaba tan avanzada que podía curar la mayoría de casos, por lo que con suerte eso reduciría mi búsqueda sustancialmente.

Me puse el broche y entonces me quedé dudando en si dejarme el auricular puesto, podría ser una molestia pero por otro lado, como no podía recordar a mi objetivo quizás podría escuchar algo significativo a través de él de los demás que pudiera ayudarme, no perdía nada en dejarmelo puesto, y si más adelante me resultaba un estorbo siempre podría quitármelo sin problemas.

El coche se paró delante de una mansión con unos jardines impresionantes. Ese campamento sin duda era solo para niños ricos, o almenos daba toda la sensación de eso. Salí del coche elegantemente. Observé el despliege que se había montado, los demás iban llegando. Al otro lado en la puerta de la mansión había varia gente mirando y curioseando, cuchicheaban y señalaban en nuestra dirección, sin duda llamábamos la atención, y por si fuera poco parecía que ya nos esperaban. Empecé a andar por la alfombra roja tranquilamente, aquello parecía la entrada de un festival de cine lo único que mucho más bonito, hice caso omiso de la gente que observaba desde la mansión y admiré los arcos decorados con flores, desprendían un olor increíble, entonces caí en la cuenta de que no me había puesto ninguna colonia, así que observé entre las rosas y busqué una pequeñita, la arranqué y me la puse en el pelo a modo de decoración, haría juego con el color de mi vestido.

Entré en la mansión donde se podía escuchar la música, no era excesivamente fuerte, dejaba un ambiente perfecto para poder entablar una conversación,. Era hora de intentar buscar a mi objetivo, no estaba segura de ser capaz de conseguirlo mis recuerdos eran muy vagos, pero quien sabe quizás al verlo me acordaba de él, es decir su rostro tenía que sonarme aunque fuera ligeramente. Encontrarlo era lo difícil, una vez hecho lo demás sería bastante fácil probablemente, mis dotes de seducción no eran nada del otro mundo pero por otro lado era una mujer, y él era un chico, adolescente además, por muy santo y puritano que fuera las hormonas son las hormonas, además es un hecho de que mi belleza esta muy por encima de la media, había muy poca gente que pudiera estar a mi altura físicamente y p`robablemente no tendría muchos rivales en ese aspecto.

Me detuve observando atentamente a la multitud intentando descubrir a mi objetivo entre toda aquella gente, no podría haber mucha gente con aquellos rasgos, o eso espero.

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Tirada de advertir

Vaya... ¿Pero que mierda de disciplina quiere mi padre que aprenda aquí?
A ser posible, vodka, si no, prefiero cerveza sin alcohol. No me gustaría despertarme mañana de resaca si tenemos que correr.
Analizando fríamente la situación, había chicas, alcohol, y un 100% de posibilidades de pasar una buena noche acompañado... ¿En que puta clase de campamento pasa esto? Llego a saber que esto existe y me vengo antes... Aunque unos profesores tan jóvenes... Huele un poco a chamusquina...

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Por la amistad. dije, y bebí un trago. A mi me ha mandado mi padre a la fuerza. Decía que a ver si en un campamento aprendía algo de disciplina, pero visto lo visto... Aunque, cambiando de tema... ¿Qué problema hay en una cabaña mixta? Yo no veo ninguno. Dije, guiñando un ojo.

Para mis adentros aún no me lo acababa de creer... ¿Pero esto iba en serio?¿Seguro que no era el día de los inocentes? Desde luego era un campamento jodidamente raro... Pero bueno, habría que aprovecharlo al máximo.

Aproveche sanamente la admiración que despertaban el resto de mis compañeros para escabullirme rápidamente al interior, es mas aceleré un poco el paso, sin correr claro está.

(Humm, primero establecer contacto visual... luego.. un milagro estaría bien. Quizás le guste la tecnología viniendo de donde es,...aunque no creo que el mamón de picas me lo pusiera tan fácil).

Me doy un paseo rápido por la casa, tanto interiores como exteriores intentando evitar el gentío pero concentrándome en la búsqueda de la muchacha japonesa.

Me notaba nervioso, no estaba en mi "medio" natural, tenia calor así que me afloje un poco la corbata. La música estaba demasiado alta, necesitaba un respiro, así que me puse a buscar unos lavabos aprovechando el trayecto por si me encontraba con la mujer de la foto.

Peter Qian

La caceria habia empezado, estaba un poco preocupado porque no estaba seguro, aunque con suerte para mi era una chica y probablemente con esos ojos no deberia de haber mucha gente.

Pero todavia nos aguardaban mas sorpresas, al lado mia habia un maletin, con un comunicador y un broche. Gracias al comunicador Picas y los demas nos daron alguna pista mas sobre como actuar, ademas los broches nos daba acceso a la zona vip donde solo nosotros y los profesores tenian acceso, ciertamente una muy buena ayuda, la verdad es que despues de haber comido y pasado con ellos gran parte del dia cada vez parece mas que seremos como una familia.... y no estaba seguro de como opinar de eso, no podia bajar la guardia en cualquier momento por lo que pudiera ocurrir.

Llegamos, el lugar era bonito si, aunque no tenia especial interes para mi, supongo que seria por haber estado en varias fiestas por la posicion de mi madre que todos los lugares me resultaban demasiado vistos.

Sali del coche, despues de colocarme el broche y dejarme el auricular, quizas oyera a alguno nombrar a mi objetivo, con gafas y esos ojos, vaya, no deberia de ser de lo mas normal.

A diferencia de algunos de mis compañeros yo me quede casi en la entrada observando a la gente con cara cordial, intentando vislumbrar a mi objetivo a lo que una chica se me acerca para tomar algo. Normalmente no haria mucho caso pero esto no era una situacion normal, y que demonios, era guapa.

Despues de unos segundos mirandola a los ojos, le conteste con cara amable, dejando ver levemente por mi voz que no soy 100% Americano, solo un poco "hora de hacerse el exotico".

-Qian Peter, encantado. Porsupuesto, ¿Vamos?

Le dije ofreciendole mi mano para que la cogiera, "Si hay que ser un caballero, que asi sea"

Rogue Miriade

Segun el chofer, abri el maletin, y me puse el precioso broche en forma de rosa en el lado derecho. Parece que los maestros no querian perdernos de vista. Seria facil localizar a mi objetivo, por mi experiencia con la organizacion anterior, y espero que la ayuda de Picas sea eficaz, porque sino...

Cuando baje del coche, una gigantesca mansion se abria ante mis ojos. Aquello estaba repleto de niños y niñas. Sali del coche dispuesta a conseguir el numero de telefono lo mas pronto posible. Todos los chicos y chicas nos señalaban a mi y a mis compañeros de AS, que salieron de sus respectivos vehiculos. Me dirigi con las manos a la espalda a traves de la alfombra roja, deleitandome con todo aquel lugar salido de un cuento de hadas. Jamas vi un edificio tan precioso.

Sin mas dilacion, empece a buscar por el exterior a aquel emo vampiro que recordaba de la foto-dibujo de Picas.

Tras montarme en el coche, resulto que habia una maleta con un auricular y un broche. Me puse el auricular. Era Picas... Nos empezo a decir que si tal, que si cual, que si habia que tener contacto visual, ser un ligon, ser un cabronazo... En fin, ser como Picas. Tengo que intentar pasar esta clase. Como sea, como pueda. Aunque lo unico que podia asegurar era que Picas era tambien un pervertido. Y no, no voy a ser un pervertido, aunque tengamos que ser como Picas.

Me puse el broche. Era un VIP Pass. Ya sabes, el rollo de gente con billete. Cuando me baje del coche, mire por los alrededores, buscando alguna parte por donde empezar. Aunque no pude evitar contemplar el maravilloso paisaje a mis alrededores: Era una preciosa mansion con unos jardines tambien preciosos. Magnificos para traer a tu pareja... Lastima que te tengas que separar de ella para ligarte a otra... Lo dicho, todo por Picas.
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Tirada de Advertir.

Elainne Hinari

Tras el saludo del chófer y la indicación sobre el maletín, lo abrí. Allí había un broche con micro, y por él, Picas comenzó su discurso. Al terminar, comencé a pensar en mi objetivo, haciendo esfuerzos por acordarme de algo sobre el mismo... pero fue en vano... no era capaz de recordar ni el color de su pelo, es cómo si jamás fuese visto esa foto. Frustrada, suspiré y comencé a pensar una solución.

Elainne: "Ha dicho que es un objetivo difícil... y que es posible que tenga pareja... eso quiere decir que no cualquiera que se me acerque puede ser el objetivo. Cabe la posibilidad de que esté con su pareja... tendría que escoger mi objetivo prácticamente al azar, y jugármelo a suerte... sabía que esto no se me daría bien... ¿qué hago?... ¡aah! ¡no voy a conseguirlo!... espero tener suerte allí dentro..."

La limusina paró frente a una mansión con un jardín precioso, era todo fascinante. Salí del coche intentando destacar entre los demás y llamar la atención, y fui avanzando.

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Tirada de estilo: 55
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Anduve sobre aquella alfombra roja hasta llegar a los adentros de aquella mansión, ignorando la gente que nos señalaban y cuchicheaban. Una vez dentro, podía distinguir ya música, a un volumen agradable que cubría toda la sala. Comencé a mirar de un lado para otro fijándome en todos los individuos que me llamasen la atención de aquella sala. Probablemente sería un chico guapo, por que las personas guapas son las más difíciles, y, aunque no andaba segura de mí misma, esperaba tener suerte a la hora de conseguir mi objetivo.

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Tirada de advertir: 34

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Tentador, cuanto menos...
Suena tentador. Jamás había conseguido un puro tan fácilmente. dije, mirando a la chica de reojo Pero ahora que lo dices... tengo una idea aún mejor... DOS puros habanos a que lo consigo yo antes que tú.