"Nunca fue fácil el aprendizaje de la virtud" Lucio Anneo Séneca [Empezando, Jorge, Salvador y Natsu]

Khende, con gran indiferencia ante la excesiva dulzura de la niña, respondió:-Mi nombre es Khende- omitió su apellido por miedo a que alguien hubiera oído hablar de su herética familia-y, sí, soy nuevo.
Lo que ahora le interesaba era el otro niño que había participado en la lucha ¿Es que era ciego o qué?
¿No había visto lo que era capaz de hacer? Bueno, era mejor no perder los nervios, así que Khende se relajó y le dijo (con un aire ligeramente insolente):-No se si es que no estabas atento durante la pelea o qué te pasa, pero estos ojos son un don divino- Khende activó y desactivó los ojos varias veces para que lo viera

-Cuando están activos, me permiten ver los hilos que componen toda la realidad y, cortando estos hilos, puedo destrozar desde paredes de piedra a personas. También me permiten ver cosas sobrenaturales, como espíritus o magia, estén activos o inactivos.

Jarvan

¡Por fin! El niño llamado Khende posee dones divinos. Puede cambiar sus ojos y hacer que tomen la forma de una calavera. Vaya, no era como me esperaba, es algo... espeluznante. Aun así, no puedo dejar salir una exclamación!

- ¡Waaalaaaaa! ¿Eso se puede aprender? ¿Cómo me ves ahora? ¿Tengo hilos?

Mientras digo esto voy levantando los brazos, tocando por encima de mi cabeza y por alrededor de mi cuerpo buscando los hilos.

- Yo no noto nada.

¿Ese chico estaba burlándose de él o simplemente era estúpido? ¿Cómo esperaba que se pudiese aprender un don divino? Era como querer aprender poderes psíquicos o el don de la magia.
-No, no puedes ¿En serio creías que se puede aprender a tener unos ojos?
Luego Jarvan le preguntó que cómo le veía y si tenía hilos. Quizá su evidente aunque incomprensible emoción le había llevado a no notar que había desactivado los ojos y a pasar por alto la parte en la que he dicho que los hilos componen la realidad.
-Ahora te veo normal, pues he desactivado mi poder. Y sí, tienes hilos, ya que, COMO YA HE DICHO, están presentes en todo lo que existe.
- Yo no noto nada.
-No puedes notar nada raro. SIEMPRE LOS HAS TENIDO. ¿No lo entiendes? ¡Son parte de ti!
En fin, mejor iba a ser dejar la conversación antes de exaltarse más. Además, ya estaban llegando a la clase.

Salvador

Resultó haber alumnos nuevos, y se pegaron a ellos de inmediato, bueno, en realidad fue Cynthia pero salvador ya dejó claro que prefería no separarse de la gente veterana hasta estar en case, al final la panda de novatos parecía que se iba a hacer precisamente eso, una panda.

Uno de los nuevos decía tener dones divinos, a el le dijeron que también tenía, pero nadie le habló de hilos ni de ojos calavéricos, esto era muy raro.

-....y tu también estás en la clase de dones divinos?- preguntó casi tembloroso, todavía desconocía donde estaba el límite entre los dones divinos que se supone tenía y las artes malignas e impias que practicaba su padre.

-Pues no lo se, lo único que han hecho es soltarme aquí sin decir ni media palabra. De todos modos ¿Clase de dones divinos? ¿En serio? ¿Qué se supone que pretenden enseñarnos ahí?
OFF: Nótese que la familia de Khende ha trabajado con él desde que nació (mediante juegos y ejercicios), para él el uso de su legado de sangre le sale tan natural como levantar un brazo.

Se me acerca una chica bastante dulce que se nos presenta, bueno no es la clase de protección que yo elegiría pero bueno mejor esto que nada:
-Yo soy Alessia y sí acabo de llegar a Cadeus, todavía no he conocido a nadie, tú podrías presentarme al resto de la gente para hacer amigos y contarme como van las cosas por aquí ¿no?- el caso es que no dejo de pensar que tengo que buscarme un amigo grande y fuerte para cuando tenga problemas, porque por lo visto aquí hay más problemas de los que cabría esperar entre gente ``religiosa´´.

Mientras decíais todo esto, ibáis siguiendo a Cynthia por los pasillos, que parecía ensimismada. Desde luego, no parecía que los Dones Divinos fueran algo normal, pero aún así pareciais la panda de los rarillos...

Justo cuando entratéis en la clase, algo pasó...

ALESSIA:
Cuando ya se veía la puerta de la clase, una chica entró justo delante de vosotros. Tenía el pelo oscuro y algo enmarañado. Iba distraída y se pareció tropezarse al poco de entrar, porque oísteis un buen golpe.

JORGE:
Además de lo anterior, aquella chica tenía... Algo, una especie de brillo. Parecía brillar con una especie de aura blanca y carmesí. Cuando volviste a mirar a tus compañeros, viste que Salvador también brillaba algo, aunque el brillo de su aura era rojo con tonos anarajandos.

JARVAN y KHENDE:
Además de lo de Alessia, pudistéis ver que había una especie de aura, carmesí y blanca, alrededor de la chica. Pero no sólo eso, Jorge y Salvador brillaban con un brillo plateado y rojo respectivamente.

JARVAN:
Cuando miraste a Khende pudiste ver como alrededor suya también había un aura, pero en su caso era negra y a jirones. Y se concentraba principalmente alrededor de su cabeza.

SALVADOR:
Pudiste ver como aquella chica entraba en la clase. Tenía a su alrededor una especie de aura blanca y carmesí. Pero no sólo ella. Jorge brillaba con una luz plateada. Al principio de te quedaste un poco confuso, luego miraste de nuevo a la chica y pudiste ver que os miró antes de entrar, como confusa. Lo cual hizo que trastabillará y se diera un golpe contra el suelo.

Khende siguió su camino y cerró la puerta tras él. Cuando vio a la chica en el suelo, simplemente saltó por encima y la dejó donde estaba. procuró sentarse en una mesa con poca gente y lo más cercano a una esquina posible, siempre en el lado de la pared (para tener que soportar la menor cantidad de idiotas posible).

Jorge se paralizó un momento al ver a la chica caer. El verle un aura le resultaba raro, igual que versela a Salvador y a Khende. Se dirigió a la chica y la ayudó a levantarse. Tras ello le preguntó si estaba bien varias veces.

Después de aquello se sentó en su sitio sin mas intención de prestar atención a clase y no intervenir a menos que se lo pidieran.

Jarvan

- No, no puedes ¿En serio creías que se puede aprender a tener unos ojos?

- Pues... no sé...

La verdad es que ahora que lo pienso... no tiene sentido. Mis palabras han debido de sonar un tanto estúpidas.

No puedes notar nada raro. SIEMPRE LOS HAS TENIDO. ¿No lo entiendes? ¡Son parte de ti!

- Ohhh...

No lo acabo de entender. Por mucho que me toque o me mire no tengo ningún hilo. Esos ojos deben de haberle vuelto loco. O a lo mejor es cosa mía. Me acerco a Cynthia y me quedo mirándola, pero tampoco veo ningún hilo. Le paso la mano por encima de la cabeza y tampoco noto nada. Loco.

Cuando estamos entrando a clase, una niña que pasa delante de nosotros se tropieza y se cae. Khende entra detrás de ella, pero en vez de ayudarla pasa sobre ella como si no la hubiera visto. Me agacho y, junto con Salvador, la ayudo a levantarse.

- ¿Te has hecho daño?

Cuando me fijé, me di cuenta de que la niña tenía una especie de aura roja y blanca. Me giré para preguntarle a Cynthia o a Nic si sabían por qué era y me di cuenta de que Jorge, Salvador y Khende también tenían esa aura.

- Chicos... ¿por qué... brilláis?

En clase, me siento con Cynthia y atiendo a la parte de forja, la ciencia no es tan interesante.

Paso de la niña y me siento en una mesa sin darle mucha importancia a su caída y me siento una mesa vacía a la espera de que el profesor en cuestión empiece su clase.

JORGE:
La chica se levantó con la cabeza agachada. El pelo, que ya de por sí llevaba bastante desordenado, se le había quedado por delante de la cara. Se lo apartó de la cara y te contestó con una voz baja y rápido.
Gracias... Estoy bien.
Tras ello se levantó y se fue hasta una esquina, junto con Shelinne.

TODOS:
Al cabo de unos minutos, Julius y Seimus, junto con un hombre, entraron en la clase. El hombre era joven. Debía estar en la veintena. Llevaba gafas, el pelo recogido en una coleta y una bata muy manchada.
Bueno, veo caras nuevas. Soy Leonardo Lobbson, pero podéis llamarme Leo. Seré vuestro profesor de Ciencia y Forja. Mientras decía esto se colocó las gafas, que se le empezaban a resbalar por la nariz y se dirigió hacia la mesa del fondo, donde colocó los libros que llevaba en los brazos. Muy bien. Hoy por fin vamos a empezar con las clases prácticas. Aprenderéis dibujo y diseño, mecánica, química, matemáticas y todo lo que pueda enseñaros. Y lo llevaréis a la practica al final del curso, que acabará en diciembre de este año con un proyecto en el que demostraréis lo que habéis aprendido. Pero antes, necesito que os pongáis en grupos de 4, gracias. Esos grupos serán con los que trabajaréis durante el curso para realizar el proyecto final.

Jarvan

La chica se encuentra bien, así que entro y me siento junto a Cynthia. Entra un nuevo profesor, Leo, de ciencia y forja. Dice que va aenseñarnos un montón de cosas, de las cuales solo dibujar me parece divertida. También nos dice que nos pongamos en grupos de cuatro, así que me giro a Cynthia y le digo:

- Si no tienes grupo, podríamos ir juntos.

Khende se acercó a Alessia (porque al parecer era tan nueva como él y Salieri también era su tutor) y a Jorge (que le había ayudado en la pelea). Jarvan estaba ocupado con una chica, y no sabía si le convenía en su grupo.
EDIT: Al ver que Jorge no dice nada, Khende le dice:
-Eh, si quieres podemos ir juntos, que si no nos va a tocar ir con esos tres "capullos", quiera lo que quiera decir. Eso va también por ti, Alessia, ya que compartimos tutor y no pareces tan mala persona. Por último, creo que nos convendría buscar a algún veterano, porque si Jorge lo es, no es que hable mucho. Por cierto ¿Llevas mucho en Cadeus?

Ve como se me acerca el chico con el que compartia tutor y con el que hable antes:

-Eh, si quieres podemos ir juntos, que si no nos va a tocar ir con esos tres "capullos", quiera lo que quiera decir. Eso va también por ti, Alessia, ya que compartimos tutor y no pareces tan mala persona. Por último, creo que nos convendría buscar a algún veterano, porque si Jorge lo es, no es que hable mucho. Por cierto ¿Llevas mucho en Cadeus?

-Eh bueno supongo que sí pero necesitaremos a alguien que sepa hacer manualidades ¿no?

-Bueno, pues un veterano que sepa hacer manualidades, y si no ya nos las apañamos.
Khende miró a su alrededor, un grupo de gente se acumulaba alrededor de un chico de pelo castaño. Ese era.
-Alessia, tú ve a preguntar a ese chico de allí, que tú tienes cara de niña buena, además de mejor... don de gentes que yo. Y eres "ligeramente" más habladora que el mimo este.

Salvador

¿Auras?, eso era nuevo y no era el único que las veia, quizás tuviera que ver con los dones divinos pero en ese momento no tenía tiempos ni ganas de pensar, de la chica que tropezó ya se encargó otro compañero así que el siguio como un zombie al principio de la clase, si que aprendían osas diferentes los inquisitores, hasta que el profesor les dijo que se puesieran en grupos de cuatro, Salvador esperaba que esos grupos no uferan para siempre.

Jarvan se pegaba a Cynthia, por el momento aquello funcionaba, se acercó a ellos

-¿Os importa si me uno?- una vez más como en la comida hizo la pregunta no para pedir permiso sino para dejar bien claro que era lo que quería, el ya se consideraba dentro.

Jorge se quedó mudo hasta el momento que Khende le hizo una pregunta. Como respuesta simplemente dijo:

-Yo... Llevo aquí desde esta mañana...

Y después permaneció callado. Entonces Khende le dijo a la niña que había venido con el, la cual se llamaba Alessia, que fuera a hablar con un chico muy solicitado. Jorge miró en la dirección a la que Khende había señalado, para después volver la cabeza a su sitio.

-Alessia, tú ve a preguntar a ese chico de allí, que tú tienes cara de niña buena, además de mejor... don de gentes que yo. Y eres "ligeramente" más habladora que el mimo este.


¿Mejor don de gentes que él? Muy difícil no parece, pero me parece que me toca ser la que tenga contacto con el resto de la gente del grupo, bueno pos vale acepto.

-Venga vale ya voy, si está tan solicitado será por algo.


El caso, que me acerco al chico, me hago paso a empujones respiro profundamente mientras pienso lo que voy a decir y:

-Hola, soy Alessia y soy nueva aquí, me siento un poco desorientada y como todos los de mi grupo somos nuevos me preguntaba si podrías unirte a nosotros, ¿vale? Por cierto ¿cómo te llamas? Los de mi grupo es que son mú tímidos y me ha tocado a mí pedírtelo, porfaaaaaaaaaaaa- todo esto con una sonrisa de niña encantadora y, bueno, con voz de niñita perdida en el bosque que se encuentra a su rescatador.

JARVAN Y SALVADOR:
Cynthia sonrió, y asintió.
Bueno, pues vale, con vosotros dos, Shelinne y yo, ya somos 4. A ver si logramos hacer un buen proyecto, ¿eh?

ALESSIA:
Aquel chico parecía ensimismado contigo. Bueno, aquel chico y al menos 3 cuartas partes de los que estaban alrededor.
Por supuesto mi encantadora belleza de esplendor aúreo. A saber que qeuría decir aquello, pero sonaba bien Lo que usted diga y pida. Que yo, Trevor, soy su servidor.

JORGE Y KHENDE:
Podéis ver como Alessia vuelve con aquel chaval, que la sigue como si no hubiera nada más en el mundo.

Jarvan

Salvador se une al grupo y con Shelinne ya somos cuatro.

- Bien, ya tenemos el grupo completo. ¿A alguno se os da bien esto? Yo es que nunca he hecho manualidades.

Cuando ambos llegan al lugar donde Khende espera, este está sonriendo (cosa poco habitual en él) porque su plan ha salido tal como él lo esperaba, o incluso mejor.
-Hola, yo me llamo Khende, ella Alessia, aunque imagino que ya te lo habrá dicho, y este de aquí parece que le duela hablar, porque no nos ha dicho ni su nombre. De hecho, no ha dicho más que seis palabras en toda la mañana, pero me cae menos mal porque ha sido el que le ha lanzado un plato al que acaba de venir de la enfermería, el cual ha conseguido que le odie con todas mis fuerzas en muy poco tiempo y, al parecer, también el odio de muchos otros. ¿Y tu nombre es...?

Salvador

-Pues lo que se dice trabajo de verdad yo tampoco he hecho nunca, pero aprendo rápido-- verdad o no lo cierto es que Salvador tenía una mente prodigiosa, poco desarrollada todavía pero si aprendió tanto en tan poco tiempo con su padre (por mucho que lo odiara ahora) podría hacerl oaquí tmabién.

KHENDE:
Aunque al principio ni te miraba, luego el chaval reparó en tu presencia.
Yo me llamo Trevor. ¿Vosotros sois todos nuevos, no?

SALVADOR Y JARVAN:
Cynthia os miraba un poco preocupada.
Bueno, es una pena que no nos haya caído Nic. Se le dan muy bien estás cosas. Pero bueno, Shelinne dibuja muy bien, así que esa parte ya la tenemos hecha.
A esto Shelinne se pusó la cabeza un poco para sí y dijo algo que no lograstéis llegar a identificar. Palabras en otro idioma tal vez.

Jarvan

- Bueno, es una pena que no nos haya caído Nic. Se le dan muy bien estás cosas. Pero bueno, Shelinne dibuja muy bien, así que esa parte ya la tenemos hecha.

- Sí, es una pena... -digo echando furtivamente una mirada de reojo a Salvador.

No sé muy bien lo que ha dicho Shelinne, entre que parece que le hable al suelo y que no estoy seguro de que lo haya dicho en mi idioma.

- Perdona, ¿qué has...?

Miro a Cynthia. Seguro que si lo dice ella me entero mejor.

- ¿Qué ha dicho?