[Campaña] (Godia Ozonas, Dakota Cromwald, Jiang, Miquelangello Brunetti y Alexei Tolstói) La Sombra Bajo la Cruz

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Dakota y Godia fueron llevadas contra su voluntad a una habitación, donde fueron encerradas.
Al poco tiempo de estar allí, la puerta volvió a abrirse, y dos personajes fueron empujados al interior. Inmediatamente la puerta volvió a cerrarse tras un fuerte portazo.
Los dos recién llegados mostraban una apariencia de lo más estrafalaria. Uno de ellos parecía venir de oriente, mientras que el otro parecía sacado de un pasaje bíblico.

La sala está completamente cerrada y vacía: sin ventanas, ni mobiliario, tan sólo una puerta reforzada.
Los cuatro individuos se miran unos a otros, intrigados.

[¿He de suponer que me han quitado a Brigída?]

Me mantuve en silecio todo el camino, intentando parecer regia. Pero la verdad es que esto me preocupa un poco. Traicione a un caballero de Argos a favor del Imperio, aunque esto sea Bellafonte las cosas se podrian poner feas.

Llegamos a la sala que nos tenian destinada. Un calabozo, je, la ultima vez que estuve en uno fue por negarle a aquel presuntuoso Duque una noche conmigo. No pude evitar sonreir pese a la situacion. Habia salido de muchas peores.

Mire a Dakota, la pobre parecia mucho mas angustiada. Pizpaja, aprehende de aquesto, pos es la parte que los bardos y trovaidores no canta. Le sonreí a la vez que acariciaba su cabeza.

Poco despues entraron un oriental. Es la primera vez que veo uno desde aquellos que encargo el Duque de Casifols para la celebracion de la boda de su hija, y nunca tan de cerca. Los que vinieron eran maestros del control corporal. Partian placas de madera con la cabeza y ponian la mano en el fuego sin quemarse. Me pregunto si este sabrá algo de eso. Bah, supongo que no. Paso la mirada al siguiente individuo, no era tan extraño como el otro pero chocaba que un hidalgo de blanca armadura diera con sus huesos en la carcel. Humpf, odio a este tipo de personas ¿Blanca armadura, jaco blanco y acero refulgente? ¡Patrañas que solo les sirven para tomar mozuelas!

Los siguio mirando fijamente, escrutando sus gestos y movimiento pero sin decir palabra.

Fuimos escoltados por los guardias hasta una sala, donde tras empujarnos nos cerraron con llave.
Nunca me había pasado nada como esto. Una locura de noche, y al día siguiente, al calabozo. Sin duda esto parecía sacado de un mal sueño, pero era un ajetreo bastante interesante en mi monótona vida.

Antes de que mis ojos se acostumbraran a lo oscuro de aquella estancia, vi que habían dos personas más.

Dos mujeres.

Aunque no parecían ser de la misma calaña, parecía que se conocían, por la manera en la que la pequeñaja se acercaba a la grande. Las observé largo rato, no sin percatarme que la mujer caballero parecía estar masticándonos con los ojos.

Eran una extraña pareja... Me pregunto qué habrán hecho para estar aquí.
No me incomoda nada en absoluto el silencio, y no seré yo quien lo rompa.

Y esto? Por que estamos aqui? Dije en voz alta, intentando poner en evidencia mi inocencia. Tras eso, me acerque a Jiang. Sabia que no habia que matar a esos pobres bandidos. Cuando me gire, vi a las dos mujeres. Buenas, señoritas. Ustedes... por que estan aqui? Si han sido apresadas sin motivos, entonces sean bienvenidas jeje Dije, con una sonrisa. La herida casi ni me molestaba...

Me acerqué a Dakota, interponiendome entre ella y los extraños. El rubito comenzó a hablar, al parecer afirmando su inocencia.

¿Do' demonios me he metido? Gòdia escupio al suelo. Y aquestos... si es un calabozo es que son presos... no habria de valentones fiarme, y menos de aquellos que proclaman ser puros como recienacios.

No tenia intencion de mediar palabra, asi que aquel jaque solo se llevo una dura mirada por su intento de romper el hielo.

MIro desconcertado a mi señora Godia.

-Eh... ¿por qué estamos aquí?

La miro con ojillos.

Me causa curiosidad un poco el tipo oriental. No puedo evitar quedarme mirando fijamente sus rasgos...

Las dos mujeres no se inmutaban, y seguían examinando cada movimiento que hacíamos. Ahora la niña pequeña me miraba con una cara demasiado curiosa, aparté la cara para evitar un contacto directo con sus ojos. Al hacerlo, me quedé mirando a Miquel... Aún no han contestado, y Miquel las ha tratado con todo respeto. ¿Quién se creen que son?

Tuve que intervenir.

-No me gusta que la gente se quede mirando sin decir nada - me recordaba demasiado a cuando era pequeño y la gente que me vio crecer me miraba como si fuera distinto-, así que seré breve. O sois amigos o enemigos nuestros. Yo me llamo Jiang, y este caballero que con tanta amabilidad os ha preguntado se llama Miquel-. Sería mejor que tratásemos de llevarnos bien-. Estamos un poco confundidos con todo esto... sólo queremos hablar.

Mientras digo esto, mantengo mi cabeza mirando hacia otro lado, evitando que me sigan mirando directamente.

Si, bueno... Seguro que estais aqui sin motivos, ultimamente la autoridad lo hace mucho... Dijo. No lo podia creer... Una carcel,,,?!

Tras eso, se acerco a la puerta. Tse, no puedo creerlo... Yo no soy culpable! Soy solo la victima! Dijo. Tenia la herida como prueba... Ademas, el no habia matado a nadie.

Entonces, le vinieron a la mente aquellas palabras de Furion. Quien nada debe nada teme... Aprenderas eso con el tiempo, hermano...

No se si podre salir de esta, hermano... Espero que me escuches desde los reinos de Dios... Saldre de aqui, lo veras.

Me quedé callada sin decir nada un rato. Miré al tipo de rasgos orientales. Me avergoncé un poco por embobarme mirandolo así, con tanto descaro. Yo también tenía los ojos raros y la gente se me quedaba mirando desde siempre, así que me sorprendi sintiendo una leve empatía con aquel hombre.

Además, no parecían malos tipos. No parecían bandidos ni inquisidores. Uno de ellos hacía una mueca de dolor. ¿Le dolerá algo? Me intereso un poco por él y me acerco con una curiosidad profesional más fingida auténtica intentando localizar la causa de la molestia de aquel hombre.

-
Hum. Me encantaría que mi señora Godia viera que soy útil.

Tirada de Medicina(10)
Resultado: 81

El miembro 'VonClouve' ha efectuado la acción siguiente: Tirada de dados

'Dado de 100' : 71

-Eh... ¿por qué estamos aquí?

-Dos opciones. En este momento, con la pequeña crisis que teniamos me olvide de hablar con suavidad para la pequeña niña. O saben quien soy y somos presos politicos o nos han cojido como chivos expiatorios. Dos mozas, una de ellas que viste como macho y la otra una criaja de ojos raros, ademas extranjeras... No seria extraño.

Supongo que aquestos estan aqui por lo mesmo, aunque aquel pareceille que tiene el canto del culpable. Dije mientras señalaba con la cabeza a Miquel.

Me fije como el oriental se escabullia de los purpureos ojos de Dakota, para despues arremeter con una retahila de frase con un extraño acento.

Mira, extranjero. Escupio la palabra.Ha dado la casualidad de que estamos a la vez en esta habitacion ¿O amigos o enemigos? Pfff, no me hagas reir. Estas acojonado y esperar que alguien que muestra mas compostura que tu amigo te cuente que te ocurre. Pero esa no soy yo.

Recordo las palabras del oriental ¿Ese un caballero? No pudo evitar reirse. Mira Dakota, al rubio le han encerrado por impostura seguramente ¿Como puede decir que es un caballero si da voces como el mas pelagatos de los rateros? Calladito estarias mejor. Le dije a el ya directamente.

Intimidar [Contra ambos]

El miembro 'Sir Lobo' ha efectuado la acción siguiente: Tirada de dados

'Dado de 100' : 40

Jiang y Miquel, haced una tirada de Frialdad.

[Offrol: por cierto, Lobo, voy a sacar a Godia de la partida en cuanto esta gente haga sus tiradas. Si no quieres irte todavía, avisame. De todos modos, una vez estés fuera, en cuanto tu quieras entrar de nuevo, volveré con tu personaje inmediatamente.
Y por cierto, no dejaré que nadie controle el personaje de otro, ni tampoco yo me haré responsable de un jugador.]

Las palabras de aquella "gran" mujer tocaron hondo en mi corazón, ya de por sí confuso...

Tirada de frialdad: -25 +

El miembro 'xinu' ha efectuado la acción siguiente: Tirada de dados

'Dado de 100' : 87

[Offrol: Tios, cada vez que me conecto se jode mas la cosa... xD]
[Offrol: Lobooo!! Que no soy rubioooooo!! xD]

Tirada de Frialdad: -30+

[Offrol: lo que faltaba... Ahora encima viene una tia a intimidarme... Seguro que pifio T_T]

El miembro 'Furion' ha efectuado la acción siguiente: Tirada de dados

'Dado de 100' : 93

Abierta.
[Offrol: Uf, de la que me salve... xD]

El miembro 'Furion' ha efectuado la acción siguiente: Tirada de dados

'Dado de 100' : 89

Jiang no supera la tirada. Te achantas, pero lo justo. Miquel la supera con mucha diferencia.

Jiang se acobarda ante la imponente presencia de Godia.
Miquel, sin embargo, hace gala de un valor épico. Las palabras amenazantes de Godia no le inspiran miedo alguno. Al contrario, le resultan hasta infantiles.

Tse, no pareces haber vivido lo suficiente como para saber sobre este mundo en el que vivimos... Dijo Miquel, sin temor alguno. Por mucha ropa y/o armadura que tuviera, seguia siendo una niña, al menos en sus palabras. No te pienses que porque puedes intimidar a alguien eres la mejor... .

Con renovadas fuerzas, Miquel se paro enfrente de la ventana, intentando buscar a alguien responsable de la celda. Eh, tu! Se puede saber por que estamos encerrados aqui? Hay que ver... ultimamente las autoridades no velan por el bien de las ciudades,,, Dijo en voz alta, de manera que el guardia lo escuchara [Offrol: Todo esto imaginando que lo haya, claro xD] Mire que no cuidar del bien de los ciudadanos... Y yo que pensaba que ese era su deber...

Las palabras de Miquel no parecieron servir de mucho. Hubo un breve silencio.
De pronto, la pesada puerta se abrió. Un hombre con armadura y atuendo azul, de facciones toscas e intensa mirada, cruzó el umbral. Dos guardias lo escoltaban desde fuera.
Godia y Dakota ya conocían a aquel hombre, fue quien las trajo hasta el cuartel.

- Tú, la mujer rebelde, acompañame.

Godia, sin perder la compostura, se levantó dignamente y salió de la sala, siguiendo a aquel hombre. La puerta se cerró tras ella. Jiang, Miquel y Dakota se quedaron extrañados.

Mientras tanto, la guerrera, flanqueada por dos guardias, atravesaba uno de los pasillos de aquel edificio.

- No me he presentado como es debido ¿cierto?

Decía el fornido soldado mientras caminaba.

- Soy el Capitán Alsar Moonwrath. Estoy al mando en este edificio. ¿Y tú, cómo te llamas?

Tse, ya vendran por nosotros... Dije. Tras eso, mire a la pobre niña que estaba alli con nosotros... Y tu, dime... por que estas aqui? Es raro ver a niñas en una celda... No podia creer que hasta a los niños estaban encerrando solo por un par de bandidos de poca monda...